El nombre de Fataga es de procedencia aborigen del siglo XV, conocido como ADFATAGAD.

Tiene una imagen propia de los más hermosos pueblos de Canarias, entre casas blancas y calles empedradas, nos encontramos también con edificios históricos y un paisaje natural protegido desde 2010 de gran belleza sembrado de palmeras canarias (el Barranco de Fataga).

En cuanto a patrimonio histórico, la aldea cuenta con una iglesia consagrada a San José, y que fue construida en 1880 por sus propios vecinos.

Destaca los lavaderos, fuentes públicas a las que acudía la gente del lugar con sus bernegales, cacharros de latón y servían de punto de encuentro vecinal.

El Molino del agua era utilizado por vecinos y agricultores hace medio siglo para ir a buscar gofio. El molino era movido a través de una rueda impulsada por agua. Llamativo por los seis pilares que sostienen un acueducto que conduce el agua desde la acequia hasta el vaso. Este está formado por tres escalones circulares de piedra y barro.